Un sábado a las 08:23 AM nací decidida a cambiar el mundo para después, comérmelo.

 

Operadora de cámara. ENG de carretera y manta. Realizadora audiovisual. Creadora de cosas con un clip y celo como MacGyver. Operadora de control de emisiones. De pequeña quería ser ermitaña y plantar lechugas. Bohemia. Lectora. Capaz siempre. Adicta al cine, las series y a la telebasura. Inquieta. Curiosa. Miope. Cantante de automóvil. Garrapatera y furgonetera. De los raros que si le encanta un tren, vuelve a por él aunque le arrolle de nuevo. De buscar la luna siempre al salir de casa porque la vida es más bonita cuando perdemos 3 minutos en hacerlo. Me he perdido tantas veces que llevo tatuada la constelación de Casiopea para encontrar mi norte. Me enamoro en cada faro y 8 veces al día en el metro. Creo que hay una ganancia en cada pérdida. De los que se tatúan cosas para no olvidarlas -comprar pan. Poner lavadora- Vida contemplativa. De los que viven en un piso de 30m2 con Carrie, Frida, Amelie, 200 películas, 150 libros, 20 libretas a medio escribir, dos perras, un sofá de 1m20 lleno de pelos, un olivo y un mini huerto urbano, una Olivetti con la Ñ atascada y un par de fotos analógicas. Enamorada de la moda juvenil, de los chicos, de las chicas, de los maniquís, de la movida y del postureo cultural. Peregrina y amante de ver el futbol de espaldas comiéndome una pizza. ¡La felicidad es una sillita al sol!

 

Catalana sin playa -vaya vaya- en Madrid.